El periodista describe claramente la consecuencia de una actitud adoptada por el gobierno español y sus lamentables resultados sufridos por una parte del pueblo. Ocurre que son muchos millones de euros los que habitualmente gastán los marroquies al viajar en sus vacaciones anuales desde los países nórdicos, los del centro de Europa, Italia y la misma España hacia Marruecos para visitar a sus familias. Todos estos euros utilizados para combustible, estadías, comidas y obsequios eran una gran inyección para las alicaídas economías por la pandemia de las distintas ciudades españolas. Este año no ocurrirá como hasta ahora ya que los recorridos se han desviado a otros puertos de Francia, Italia y muy recientemente de Portugal.

Para que se pueda entender mejor tengamos en cuenta que el pasado 6 de junio, el Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí anunció que la operación Paso del Estrecho este año no cruzaría los siete puertos españoles por donde transitó hasta 2019 (En 2020 se suspendió por el Coronavirus). Esta decisión afectará de forma considerable a la economía española, pues cada verano cientos de miles de familias marroquíes regaban de dinero los negocios locales por los que pasaban con sus coches hasta los topes. Marruecos insistió en que se trata de una medida epidemiológica, pero los damnificados de uno y de otro lado del Estrecho no tardaron en acordarse del reciente rifirrafe político entre ambos países, según nos informa el portal El Confidencial.

Es para recordar que el insólito y fallido gesto del gobierno español por permitir el ingreso ilegal de un jefe Polisario, con pasaporte falso al reino de España, además de violar las propias reglas de juego de la Unión Europea sobre cuestiones migratorias, también perjudicó las buenas relaciones con el Reino de Marruecos. A partir de este suceso se desencadenan una serie de hechos que por estas horas repercuten.

La diplomacia de España operó y logró que el Europarlamento manifestara su respaldo, con la excepción de la mayoría de los eurodiputados franceses.

Mas allá de la justicia o no de la postura española, sabemos que por espiritú de cuerpo esta legislatura  tiende a apoyar a sus miembros, aunque como en este caso el respaldado haya violado una regla importante para el conjunto como es la «cuestión migratoria». Por eso este parlamento continental terminó criticando las políticas migratorias del Reino de Marruecos.

Esto ha disparado una serie de reacciones favorables al país norafricano, a saber:

Con un apoyo casi absoluto, el Parlamento Árabe reunido en El Cairo, reiteró ayer sábado su rechazo categórico a la resolución del Parlamento Europeo sobre Marruecos, subrayando que esta decisión, con todas sus críticas y acusaciones infundadas, constituye una provocación y una politización inaceptable de los esfuerzos del Reino para luchar contra la inmigración ilegal.

Al término de su reunión de urgencia, el Parlamento Árabe denunció la injerencia del Parlamento Europeo y su insistencia en implicarse en una crisis bilateral entre los Reinos de Marruecos y España, que puede resolverse por vía diplomática y mediante negociaciones bilaterales directas entre ambos países.

También alabó los incansables esfuerzos del Reino de Marruecos en la lucha contra la inmigración ilegal, que emanan de una fuerte voluntad política y de las altas orientaciones de SM el Rey Mohammed VI, como líder de la Unión Africana en materia de migración.

La decisión destaca, en este sentido, que la organización en diciembre de 2018 por parte de Marruecos de la conferencia internacional que fue culminada por la adopción del Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, así como la acogida por parte del Reino de la sede del Observatorio Africano de la Migración en diciembre de 2020 y la adopción de la Agenda Africana para la Migración por iniciativa de SM el Rey «son todos hechos que confirman los esfuerzos nacionales, regionales e internacionales desplegados por el Reino de Marruecos en el ámbito de la migración y al mismo tiempo refutan las falsas alegaciones contenidas en la resolución del Parlamento Europeo.»

El Parlamento Árabe también subrayó la necesidad de abrir el dosier de las ciudades marroquíes de Sebta y Melilla y de las islas marroquíes ocupadas, para resolver esta situación que se remonta a la época colonial.

El Parlamento Árabe expresó su categórico rechazo al «enfoque arrogante inaceptable del Parlamento Europeo al tratar asuntos relacionados con los países árabes, adoptando resoluciones que están en las antípodas de los requisitos de la deseada asociación estratégica entre los países árabes y europeos».

Así, llamó al Parlamento Europeo que abandone estas prácticas provocadoras y adopte posiciones prácticas y responsables que refuercen la cooperación y la coordinación conjunta entre los países árabes y europeos, subrayando la necesidad de elaborar un plan de acción árabe unificado e integrado, para hacer frente a estas posiciones irresponsables del Parlamento Europeo y garantizar el respeto de la soberanía de los países árabes y la no injerencia en sus asuntos.

El Parlamento Árabe también hizo un llamamiento a la Unión Interparlamentaria, al Parlamento Mediterráneo, a la Asamblea Parlamentaria de la Unión por el Mediterráneo y a todos los parlamentos regionales para que rechacen y condenen esta decisión, que contradice las normas de la diplomacia parlamentaria reconocidas internacionalmente.
Al finalizar el encuentro de El Cairo, varios miembros del Parlamento Árabe saludaron, el papel pionero desempeñado por Marruecos, bajo el liderazgo de SM el Rey Mohammed VI, en el ámbito de la migración, subrayando el respeto por el Reino de sus obligaciones en este ámbito a pesar de los desafíos planteados por la situación epidemiológica en la escena mundial.

Este respaldo tan importante, con la sola excepción de Siria, Argelia y Libano, del mundo Árabe en pleno y el apoyo a la reivindicación de todos los reclamos de soberanía sobre sus territorios, significan mucho para Marruecos, como así también el pedido que el gobierno norteamericano le habría realizado a su par español, recordándole la importancia de mantener buenas relaciones con Marruecos, como país amigo y pieza clave en la lucha contra el terrorismo. Le recordaron a los españoles las gestiones  desarrolladas para lograr la paz en Libia y la próxima gestión marroquí que tendría una evidente repercusión internacional si se produce en los próximos días.