Stefani: «No hay nada más libertario que el régimen de promoción económica fueguino»
En el marco del debate de la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, algunos diputados de distintos bloques propusieronlaeliminacióndelaLey19.640comogransoluciónaldéficit crónico que tiene nuestro país.
Paradójicamente, muchos de los legisladores que promueven la eliminación del Régimen Promoción Económica, no solo no conocen la provincia, sino que también ignoran que este esquema económico ha generado miles de puestos de trabajo genuinos y permitió ni más ni menos que un territorio nacional se convirtiese en la provincia número 23 de la Argentina.
Sin embargo, me parece importante hacer algunas aclaraciones sobre ese famoso 0,35% del PBI, por el que tanto se escandalizan. No implica subsidios a la inversión; no pone plata el Estado nacional o el fisco en la industria fueguina… se trata de incentivos a la organización y al trabajo como lo hacen otros países desarrollados con libertad de mercado.
Concretamente, las exenciones consisten en que no pagan aranceles por los insumos de importación y los bienes de capital, no pagan impuesto a las ganancias, tienen alguna alícuota diferencial con los impuestos internos con respecto a los productos importados, y también hay una apropiación de un presunto crédito fiscal del IVA.
En este orden de ideas, resulta fundamental señalar el impacto negativo que tendría la eliminación de la Ley 19.640 no solo para la provincia sino también para todo el país.
Puntualmente, se perderían 600 Millones de dólares en impuestos internos que pagan las empresas anualmente, 19.000 mil puestos de trabajo (con sus cargas patronales y provisionales) y 400 millones de dólares que se necesitan de divisas para importar.A su vez,no es un dato menor que en un país que hace décadas sufre la informalidad laboral, el Régimen de Promoción Económica aporta 100% de trabajo registral.
Sin perjuicio de ello, lo más preocupante es que eliminaríamos una de las pocas políticas públicas que tiene la Argentina. Cincuenta años atrás, en la década del 70 mi provincia era un territorio nacional en el que vivían 13.000 personas y de esos habitantes la mitad eran extranjeros.
Actualmente, cinco décadas después, conforme al último censo hay 190.641 habitantes distribuidos en las ciudades de Río Grande, Ushuaia y Tolhuin pero sobre todo contamos con más de 40 empresas, que exportan tecnología, Silobolsas, producen el geotextil para extraer el litio, desarrollo tecnológico y autopartes. Estamos hablando de empresas familiares que, con sacrificio y esfuerzo, lograron crecer a pesar de estar a 3.200 km de Buenos Aires y constantemente vuelven a invertir en la provincia.
Es por ello, no tengo dudas que no hay Ley más libertaria en la Argentina, se bajaron impuestos, eso atrajo inversión de empresarios argentinos, y se viene generando trabajo y desarrollo desde hace 5 décadas…. ¿acaso eso no es lo que buscamos para el país?.
Sin lugar a dudas, el régimen de promoción económica es perfectible, se puede mejorar y aggionar a los tiempos venideros, pero es inadmisible que de un plumazo se pretenda eliminar un régimen que desde hace medio siglo sostiene el desarrollo de la provincia
Comparto y suscribo la idea en que es sumamente importante reducir el déficit fiscal… siempre y cuando no se ponga en juego el federalismo y la soberanía.
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